Las madres, las grandes incomprendidas. Las que nos llevamos la mirada de «odio» cuando forzamos una situación para que nuestros hijos se esfuercen y lo consigan por sí mismos. Sabemos que sería mucho más fácil y rápido que nosotras lo hiciéramos, pero tenemos que enseñarles a superarse a diario ¿Os suena de algo esto? Seguro que sí.

Para los niños cualquier cosa nueva es un reto. Hasta las cosas más sencillas: atarse los zapatos, cortarse la carne con cuchillo, hacerse la cama, o ponerse un vaso de leche, son difíciles.

En estos pequeños retos está presente el esfuerzo y la superación. La sensación de haber logrado algo por sí solos. Con estos pequeños retos lograremos enseñarles la constancia, y cuando tengan problemas más grandes sabrán cómo solucionarlos por sí mismos.

Con este corto pueden aprender sobre el esfuerzo y la superación.

En este cortometraje de Piper, uno de los mejores de Disney Pixar, podemos aprender muchas cosas.

Los niños se verán reflejados en el pequeño pájaro que tiene que hacer frente a sus miedos, sin la ayuda implícita de la madre. Ese miedo a lo desconocido, tan común en los niños, que pasa de inmovilizar a nuestro personaje principal, a pasar a un segundo plano cuando se da cuenta que no es para tanto.

Los padres veremos cómo la madre del protagonista se hace a un lado, sin interceder, dejándole que aprenda de sus errores. Siempre observando por si hay peligro, pero sin facilitarles el camino ¡Guau! ¿Qué tan complicado?

Para superar el miedo hay que enfrentarse a él

Muchas veces los niños tienen que enfrentarse a sus miedos. Miedo a la oscuridad, miedo al ruido o miedo al viento (mi hijo tuvo una época que pensaba que saldría volando com Mary Poppins cuando hacía viento).

Después de ver este video podéis hablar sobre:

-El miedo que tenía al principio el pajarito a salir del nido, pero cómo sacó fuerzas para enfrentarse al mar y poder encontrar comida.

– Cómo pasa de darle terror el agua a disfrutar con ella una vez se ha dado cuenta que no le pasa nada, es más, incluso es divertida.

– Cómo su mamá no le ayuda al principio, no porque sea «mala», si no porque él tiene que superar su miedo sólo.